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viernes, 8 de enero de 2016

HISTORIA DEL QUILTING

Mi abuela decía que para poder entender las cosas deberíamos echar una mirada al pasado para que de esta manera podamos entender la senda por la que debemos caminar.


Unos de los recuerdos más vividos que tengo de mi abuelo es verlo cosiendo círculos para luego formar con ellos pequeñas bolsitas fruncidas que luego unía para formar colchas con hermosos diseños; aunque he de confesar que para ese entonces no sabía que aquello era patchwork, siempre me llamo la atención. Quién sabe dónde andarán; luego de tantos años, aquellas hermosas creaciones, pero independientemente de eso, creo que mi abuelo se sentiría muy feliz, o eso creo yo; de ver que una de sus nietas sigue sus pasos en el hermoso arte del patchwork.

Yo creo que la filosofía de mi abuela aplica en todos los aspectos de la vida del ser humano y es por esta razón que hoy y en honor a mi abuelo y para inaugurar mi blog, conseguido gracias a mi esposo, gracias esposito! Les voy a contar un poquito de la historia del quilting o patchwork.

El término Patchwork es un vocablo proveniente del inglés: “patch”  (parche) y “work”  (trabajo, obra). Literalmente significa trabajo con parches o remiendos. El Patchwork es una técnica textil que permite confeccionar piezas uniendo fragmentos de telas de diferentes tipos y colores. Es decir, es una forma de costura que consiste en coser o ensamblar distintas trozos de tela formando otra tela o un diseño más grande.

El origen del patchwork (trabajo con parches o retacería artesanal) se pierde en la memoria de las diferentes culturas que han poblado la tierra. En sus albores, el patchwork consistía en la unión de restos de material textil para formar una sola pieza y confeccionar así artículos útiles. También se empleó para remendar, mediante la aplicación de un trozo de tela o parche, el desgaste de los tejidos tanto en el vestuario como en otros artículos textiles domésticos.
                       Fragmento de un quilt de seda de los siglos XIII-XIV Irán


La técnica del Patchwork es la más utilizada para hacer colchas o edredones (Quilts, en inglés). Pero también puede ser utilizado para hacer bolsos, chaquetas, fundas de cojines, faldas, chalecos y otras prendas de ropa. Algunos artistas textiles que trabajan con el patchwork, a menudo lo combinan con diversas aplicaciones, bordados y otras formas de pespuntes.

Su origen data de épocas muy antiguas, aunque es muy difícil precisar una fecha concreta a este respecto. Entre los ejemplos antiguos descubiertos tenemos una tienda de campaña funeraria de patchwork que fue encontrada en la tumba de la Reina Esi-mem-kev de Egipto, datada en el 980 a.C. En 1903 se descubrió una figura de marfil tallada de un faraón de la primera dinastía egipcia (3000 a.C.). El faraón porta lo que parece ser una capa acolchada. 

También se ha encontrado aplicaciones del siglo IX a. C.; una funda para silla de montar con aplicaciones de fieltro del siglo V o IV a.C., encontrada en el sur de Siberia; y una alfombra acolchada de la región de Turania, junto al Mar Negro, que data del siglo I a.C. (cuyos bordes están adornados con cenefas de formas aplicadas rellenas con dibujos lineales acolchados, realizados a pespunte), la complejidad de estos trabajos hace pensar que el nacimiento de estas técnicas es incluso anterior.
Sombrero encontrado en Egipto 1000-1400 ac.

Un quilt es un conjunto de paños en forma de sandwich, con una parte superior, que suele ser la parte decorada, una parte posterior, y un relleno en el centro. Bajo el término general de Patchwork existen tres tipos diferentes de colchas:

1.    La colcha sencilla en su totalidad de tela,
2.    los edredones con apliqué, y
3.    edredones formados por la unión de diferentes retazos.

Como vemos, el Patchwork suele ir unido a otra palabra inglesa: Quilting. El quilting es el arte del  acolchado y hace referencia  a las costuras que unen tres capas (dos telas y un relleno) firmemente cosidas entre sí. El edredón está formado por tres capas de tela: la del patchwork, una capa de guata que sirve de aislante y una capa que sirve como soporte. Estas tres capas se cosen al mismo tiempo con puntadas decorativas o líneas rectas (“quilted“), ya sea a mano o máquina.

El Patchwork se confecciona uniendo fragmentos de tela para formar un lienzo de tela. Este lienzo puede tener o no figuras de tela aplicada; esta técnica se conoce como Appliqué. Para cerrar el lienzo, es necesario una tela detrás y un relleno. Para unir estas tres capas de tela, se les da costura y dicho trabajo se llama Acolchado o Quilting. La pieza final se conoce con el nombre de quilt.

Estos tres tipos de labores en conjunto, el Patchwork, el Appliqué y el Quilting,  han existido durante varios siglos en el Norte de África, Turkestán, Persia, Siria, la India y China. Fue hasta el Siglo XI que los Cruzados introdujeron estas técnicas a Europa. Dichas técnicas se utilizaron para confeccionar prendas de vestir y colchas.

Las técnicas textiles del patchwork, el acolchado y las aplicaciones se desarrollaron y fueron empleados durante varios siglos en el Norte de África, Turkestán, Persia, Siria, la India y China, pero prácticamente hasta el siglo XI no comenzaron a trabajarse en Europa con fines decorativos. Los Cruzados trajeron el patchwork y la aplicación desde Palestina donde quedaron fascinados por la belleza y los coloridos de las formas y figuras de los estandartes, y la riqueza de las aplicaciones de fieltro de las tiendas de los musulmanes. Ambas labores fueron desarrolladas en Europa a partir de entonces, para la confección de todo tipo de estandartes, banderas, tapices, ropa de cama y prendas eclesiásticas. Desde esa época hasta la actualidad, la aplicación está considerada como la técnica de costura más idónea para representar composiciones pictóricas.

Las aplicaciones prácticas del acolchado vienen utilizándose en Europa desde mucho antes. Los romanos hacían mediante este procedimiento cojines, colchones y colchas. También se confeccionaban prendas protectoras para los soldados, aunque no se puede precisar la época en la que el acolchado se destinó a este fin. Sin embargo se sabe que los cruzados, a su regreso, trajeron camisas acolchadas pertenecientes a los sarracenos. Desde el siglo XI en adelante, los soldados iban siempre protegidos por prendas de este tipo, e incluso aún en el siglo XIX, los primeros soldados americanos las llevaban como protección contra las flechas en las batallas contra los indios.

En el siglo XIII, se desarrolló en Italia la variedad decorativa del acolchado, que se denominó acolchado almohadillado o acolchado trapunto, y aunque la técnica venía utilizándose ya desde tiempo atrás en la India y Turquestán fue entonces cuando adquirió importancia por los diseños realizados en Italia. Esta forma de acolchado se realiza con dos capas de tela únicas, con las que se perfilan los dibujos a punto de bastilla; algunas zonas se realzan rellenándose por el revés de la labor. Una muestra temprana aunque perfecta es un edredón siciliano que representa episodios de la juventud de Tristán.

También por la época tomó relevancia otro tipo de acolchado, el acordonado o italiano que, aunque también se practicaba tiempo atrás en Siria y Persia, donde solía trabajarse sobre lino fino de color blanco, con perfiles de hilo amarillo y cordones de diferentes colores, adquirió renombre por los complicados diseños de portugueses e italianos.

Esta misma técnica aunque trabajada sólo en color blanco, había de adoptarse en algunas ciudades castellanas, especialmente en Toledo, a partir del siglo XVI. El acolchado acordonado precisa dos capas de tela, sobre las que se perfilan los dibujos con costuras dobles, entre las cuales se introduce después un cordón para formar relieves.


El Quilt Tristán, Sicilia, Italia, alrededor de 1360 a 1400

Entre el Siglo XIII y XV en Europa, se desarrolló el Quilting como una forma estética, además de utilitaria.

En Italia se desarrolló una forma de Quilting conocida como Trapunto. Esta técnica requiere de dos capas de tela pero sin relleno. El diseño se delinea con puntadas y luego se rellena por atrás para hacer resaltar la figura del fondo.

Ya para el Siglo XVII el Quilting, tal como lo conocemos hoy día, junto con sus formas relacionadas de Patchwork y Appliqué, se encontraba en todo tipo de ropa, tanto para exteriores como ropa interior y de cama.

En Estados Unidos de Norte América el Quilting, junto con el Patchwork y Appliqué, florecieron y se desarrollaron ampliamente debido a que fueron introducidas por los colonos ingleses y holandeses entre 1775 y 1885.

 Los primeros colonizadores elaboraban sus quilts con telas que guardaban de la ropa que ya no usaban o las cortinas viejas, ya que había poca tela y era difícil conseguirla. Al ir integrando retazos de tela de la ropa de todos los miembros de la familia, o de los textiles domésticos en la elaboración del quilt, este se transformaba en un recuerdo de la historia de la familia. Aunque el Quilting era un arte de orden utilitario, por la necesidad de hacer colchas para taparse del frío, este se convirtió en el pretexto para sociabilizar, ya que las mujeres se reunían para terminar los quilts, mientras los hombres y los niños convivían.

Con el paso del tiempo, y en la medida en que la vida se hacía más segura y era más fácil conseguir telas, el Patchwork se desarrolló y surgieron muchos patrones nuevos, transformándose esta actividad en una tradición popular muy importante.

Los patrones de Patchwork tienen nombres muy pintorescos que hoy día se conservan:
1.    Log Cabin (Cabaña de troncos)
2.    Flying Geese (Gansos volando)
3.    Drunkanrd’s Path (El camino del borracho)
4.    Kansas Troubles (Las dificultades de Kansas)
5.    Grandmother´s Flower Garden (Jardín de flores de la abuela)
6.    Lone Star (Estrella solitaria)
7.    Bear´s Paw ( Pata de oso)
8.    Broken Dishes (Platos rotos)
9.    Windmill (Molino de viento)

A principios del Siglo XX, la necesidad de  hacer artículos hermosos para cubrirse del frío desapareció, cediéndole el paso a los artículos  de fabricación industrial. En 1960, hubo un resurgimiento de la necesidad de hacer cosas con las manos. Al principio, se retomaron las técnicas clásicas de elaboración de Patchwork y Quilting para luego irse alejando de las fórmulas clásicas transformándose en un medio de expresión artística individual.

Hoy día los quilts se clasifican en estilo clásico; basado en técnicas y diseños originados de los pioneros, y el estilo contemporáneo que integra múltiples técnicas y materiales con diseños libres.

QUILT DEAR JANE
Las aficionadas al patchwork saben de buena mano que este quilt es uno de los trabajos de patchwork más reconocidos y espectaculares por su gran laboriosidad. El origen del mismo se remonta a mediados del s.XIX, de la mano de Jane A. Blakely, originaria del estado de Nueva Inglaterra.

Este Quilt no es solo una pieza geométricamente perfecta, es también creativo, innovador y original a pesar de su antigüedad, desde la pieza más pequeña hasta los grandes bloques triangulares.

Durante años Jane estuvo cosiendo las piezas que componen este quilt, viendo como la historia, la guerra y las circunstancias de la vida pasaban por delante.

El Quilt fue terminado en 1863 y por el momento se desconoce su paradero, lo que sí es cierto es que esta fantástica pieza ya forma parte de la historia del patchwork y podemos encontrar en numerosos espacios alrededor del mundo exposiciones dedicadas única y exclusivamente a este maravilloso trabajo.




Espero que les haya gustado esta pequeña gotita de sabiduría, nos vemos en mi próximo post!